lunes, 6 de mayo de 2013

Juan Tánamo y el hijo de Spiderman



Juan Tánamo, conocido terrorista fugado de una prisión yanqui en territorio revolucionario, fue visto ayer en la masa crítica haciendo de las suyas. Ésto me lo dijo el hijo del hombre araña, que iba sentado en el asiento de atrás  agarrado firmemente de una señorita, no hizo nada para detenerlo, me dijo, por que su tela araña estaba rota y por que además le cae bien Juan.

Unos chicos de aproximadamente 12 años que estaban haciendo piruetas con sus skates, vieron pasar a esa manga de locos por zona sur, y ante los gritos y sonidos extraños, decidieron sumarse:

- "ehhh loco, a donde van?" dijeron los chicos mientras se impulsaban con sus piernas
- "no sabemos, para cualquier lado!" le contestó un ciclista sonriente mientras le explicaba a los chicos que esto era Masa Crítica y que salía todos los primeros domingos del mes, a las 16hs desde el obelisco.

Pasamos por la cancha de Racing, de solidarios nomás, para dar un par de vueltas por ahí, y luego para no quedar mal con los vecinos, pasamos por atrás de la cancha de Independiente. De ahí nos fuimos pa Gerli y luego retornamos al centro del mundo: La ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Fue ahí donde lo volvimos a ver a Juan Tánamo, que zamarreaba con todas sus fuerzas las vallas del futuro NarcoBus, como rememorando sus épocas de convicto. A los pocos minutos se lo vio en cuatro patas burlándose de un pobre canino. El canino sacó la lengua y continuó su paseo. La masa también continuó con el suyo.

Aguante la Marihuana! Gritó un loco que estaba haciendo algo raro con sus manos, parecía como que estaba triturando algo con una mano, y con la otra, en posición para recibir la ostia, iba juntando esos pedacitos de algo que no se que es. Supongo que estaba haciendo algo productivo, pero no entendí por qué nos gritó eso a nosotros.

El punto máximo (como la reina suprema) fue cuando en una avenida con edificios, un joven que vive en un cuarto o quinto piso, salió al balcón a ver qué era ese quilombo infernal en la calle que estaba disturbando su domingo. Asombrado ante tal cantidad de bicis, y luces y gritos que se dirigían a el, miró a su izquierda y vio ahí en su balcón, como diciendo "mírame acá estoy" a su querida bicicleta, y que hizo el joven? Lo que todos tenemos que hacer todos los dias, agarrar la bici y salir a pedalear! Tal como en la vida de Brian (película de Monty Python que les recomiendo que vean), el joven se sintió Messi y bajó como un loco feliz a sumarse a la masa provocando una ovación extrema y gritos de todo tipo.

Y ese joven sintetizó todo lo que es y lo que pretende la Masa Crítica.